-Hope. ¿Sabes que eres una de las niñas más valientes que conozco?

-No no lo soy.

-Sí, sí lo eres. Eres increíblemente valiente y vas a salir de esta porque tienes un corazón muy fuerte. Un corazón capaz de amar la vida y a la gente que nunca has imaginado. Y eres preciosa. Tu corazón es precioso y, algún día va a amar ese corazón como merece ser amado.

-¿Cómo sabes tu eso?

-Lo sé porque he pasado por lo mismo que tú. Todo lo que sientas está bien. Prométeme que jamás te sentirás culpable. Prométeme que nunca te culparás. Tu no has cometido ningún error. Solo eres una niña pequeña que tiene una vida más vida más dura de lo que debería ser. Y por mucho que tu quieras olvidar todas esas cosas que están sucediéndote, y por mucho que quieras borrar de tu mente que esto ha sucedido, necesito que recuerdes.

Quiero que recuerdes quién eres, a pesar de todas las cosas malas que están pasándote. Porque esas cosas malas no son tú. Solo son cosas que pasan. Tienes que aceptar que no es lo mismo quién eres y que te pasa.

Prométeme que, pase  lo que pase, nunca te avergonzarás de ti misma, por mucho que lo sientas. Y puede que en estos momentos no estés entendiéndome, pero quiero que me prometas que nunca perderás la esperanza, Hope.

-Sky Davis